Arte

Arte anglosajón y celta

El arte anglosajón y celta, desarrollado entre los siglos V y XI en las islas británicas, se caracteriza por su detallado trabajo ornamental y simbólico. Combina influencias clásicas, germánicas y cristianas, destacando el uso de patrones entrelazados, nudos, espirales y motivos zoomorfos. Se expresa principalmente en manuscritos iluminados, metalurgia, tallas en piedra y objetos religiosos como cruces y relicarios. Obras emblemáticas incluyen el Libro de Kells y el Tesoro de Sutton Hoo. Este arte refleja una cultura rica en espiritualidad y mitología, fusionando tradición pagana y cristiana, y sentando bases fundamentales para el arte medieval europeo.